El Tarsonemus pallidus es el tarsonemo más extendido sobre el ciclamen.
El ciclo de producción es muy rápido, especialmente en verano, época donde los ataques son los más perjudiciales en invernaderos.
Del hecho de sus necesidades fisiológicas, permanece escondido sobre las partes más húmedas del vegetal. Los ataques al principio no se manifiestan de manera visible, el desarrollo es rápido desde el estadio de planta joven.
Los tratamientos químicos deben ser utilizados preventivamente y de manera sistemática.
Puede considerarse la lucha biologica.
Los tarsonemus son minúsculos ácaros, de tamaño inferior a 0.5 mm. Estos son tarsonémidos. Se trata de hecho de varias especies reagrupadas bajo este término genérico. Estos se sitúan entre las plagas más temidas del ciclamen.
Los parásitos más frecuentes encontrados en ciclamen y los más peligrosos son el Tarsonemus pallidus Banks (Steneotarsonemus pallidus Banks), sinónimo Phytonemus pallidus y Polyphagotarsonemus latus, más grande y más móvil.
Los tarsonemus del ciclamen son muy pequeños y a penas visibles a simple vista. De forma elíptica, los adultos son de color amarillo a pardo claro, de un tamaño de 0.2 a 0.25 mm. Parecen pequeñas arañas. Las hembras son un poco más grandes que los machos y su color varia según su estado del amarillo al pardo cuando son maduros. Tienen cuatro pares de patas.
Los machos son chaparros y característicos por su ultimo par de patas que terminan en forma de gancho. El dimorfismo sexual es muy pronunciado.
Los tarsonemus inviernan en condiciones desfavorables en estado de hembra adulta, en la planta y jamás en el suelo.
Estas hembras darán en abril huevos blancos hyalinos y ovales de pequeño diámetro (100 µ).
La hembra puede poner durante su existencia una treintena de huevos que, 4 a 8 días más tarde, darán jóvenes larvas.
Estas son de un blanco lechoso, translucidos y segmentados. Estas sufren una muda.
Las jóvenes larvas emigran hacia los jóvenes botones y las jóvenes hojas antes de la fase de ninfa al final de unos 4 a 10 días.
Al abrigo de la intemperie, las generaciones van a sucederse y podrán pasar desapercibidas.
Las ninfas miden aproximadamente 0.25 mm. Blancas, inmóviles, están en general aglutinadas a los huevos.
En 8 a 10 días, los adultos emergen de las ninfas. Los machos solo aparecen durante los meses de verano, pero las hembras tienen la capacidad de poner indiferentemente los huevos fecundados y no fecundados. Pero la reproducción es en gran parte partenogenética.
En verano, el ciclo evolutivo es muy rápido, se pueden constatar las generaciones, del estado de larva al estado adulto, en 10 días. Esta rapidez tiene por consecuencia un número elevado de generaciones por año (8 a 10). En invernaderos varias generaciones se superponen. Pero de todas maneras es en verano cunado los ataques son más perjudiciales.
Un adulto puede vivir de 10 a 30 días.
Los tarsonemus requieren una humedad relativa del orden del 80 al 100% y una temperatura del orden de 15 a 22°C. En todos los estadios de desarrollo, temen la luz. Huyen de las partes de la planta expuestas al sol y el calor para permanecer en el corazón de los botones florales, en hojas y flores jóvenes con el fin de evitar secarse su cuerpo. Tienen la piel blanda y tienen poco esqueleto de quitina. La infestación se produce sin una manifestación exterior visible. Mueren con una higrometría inferior al 70%.
En invernadero, esta especie es activa todo el año. Las larvas y los adultos se alimentan y provocan los daños.
Situadas preferiblemente en la cara inferior de las hojas, los tarsonemus pican los tejidos del vegetal. Vacían el contenido de las células superficiales. Además segregan ciertas substancias responsables de la aparición de desorden de crecimiento en las células vegetales. Por ello aparece un tejido marrón leñoso en la cara inferior de las hojas. Las características más típicas de un ataque de tarsonemus en ciclamen residen en el abarquillado de los limbos de las hojas jóvenes, una crispación y un endurecimiento de los limbos, estado anormal de las flores característico por una crispación, un desarrollo asimétrico y un desarrollo difícil de las que salen con dificultad de las hojas
Esencialmente son afectadas las partes jóvenes de la planta, pues los tarsonemus no pueden picar más que las partes más tiernas con sus piezas bucales succionadoras. Es en el curso del estado larvario donde se constatan los máximos daños.
Daños sobre hoja por Polyphagotarsonemus latus
Botones florales afectados por Polyphagotarsonemus Latus
Petalos deformados por Polyphagotarsonemus Latus
El tarsonemus adulto se desplaza con la ayuda de sus patas. Pero sus desplazamientos son muy limitados, donde localiza sus ataques. El adulto permanece a gusto sobre botones florales y flores y hojas donde se produce la nimfosis. No se desplaza si no es caso de superrepoblación masiva.
El transfer de una planta a otra se hace por contacto, o por cualquier manipulación del hombre en transcurso del cultivo. Pueden también ser transportados por el viento o por las corrientes de aire.
Tarsonemus latus (Polyphagotarsonemus latus)
De origen tropical y subtropical, esta especial esta bien establecida en Europa y ataca al ciclamen. Son de color verde-Amarillo y miden entre 0.14 y 0.24 mm. para las hembras y 0.11 mm a 0.17 mm. para los machos. Viven en la cara inferior de las hojas e invaden los brotes cuando todavía están cerrados. Los nuevos brotes infestados son deformados y decolorados, brillantes y frágiles. Las flores presentan malformaciones y los botones pueden caer. Fuertes ataques pueden conducir a la muerte de la planta.
El tarsonemus del ciclamen puede hacer su aparición durante todo el ciclo del cultivo: desde el momento de la germinación hasta la floración. Un control regular de las plantas permite eliminar rapidamente los individuos por los cuales se sospecha.
En prevencion, puede considererse de:
La lucha biologica contra estos acaros devastadores puede hacerse con la ayuda de acaros predatores. Estos predatores son a menudo más pequeños que sus presas. No son perjudiciales para la planta.
Varios acaros predatores se alimentan de esta plaga, Phytoseiulus persimilis (Phytoseiulus System, Phytoseiulus T system, Phyto-line p, Spidex, Spidex Plus) y Amblyseius californicus (Californicus system, Ambly-line cal, Spical). Pero son sobre todo activos sobre otros acaros como Tetranychus sp y no con Tarsonemus pallidus y Polyphagotarsonemus latus.
Para la lucha en invernaderos, la utilización preventiva de acaricidas especificos es indispensable pues las poblaciones so raramente homogeneas.
La constante evolución de las normativas y homologaciones de los productos de tratamiento fitosanitarios, así como las diferencias de normativa según cada país no permiten tener en cuenta el estado actual de las homologaciones. Corresponde a cada productor informarse junto a su antena local de la protección de los vegetales con el fin de respetar las últimas actualizaciones de los Reglamentos y directivas en materia de utilización de los productos fitosanitarios. Se aconseja encarecidamente efectuar una prueba previa en una muestra de planta para medir la acción de la materia activa (dosis) y la reacción del cultivo (fitotoxicidad).
En este documento encontraran la descripción de métodos de cultivo que han sido probados en la S.C.E.A. de Montourey ( Frejus/ Francia) para el cultivo del ciclamen. Estos métodos se basan sobre su propia experiencia y también en el conocimiento y utilización de experiencias citadas en referencia. Esta experiencia del cultivo de ciclamen en nuestras condiciones climáticas puede requerir alguna adaptación a otras condiciones, las casualidades naturales pueden confundir algunos resultados aunque la metodología haya sido respectada. Queremos recordar que estos consejos y sugerencias están propuestas a titulo indicativo y no serán en consecuencia una garantía de éxito. Es aconsejable realizar ensayos previos.
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